"Brahmanismo Iluminado" una comunicación transmitida por el espíritu de Ranga Hilyod

 En "Brahmanismo Iluminado", una comunicación transmitida por el espíritu de Ranga Hilyod, un antiguo maestro indio llamado el Gran Brahmán, se da una explicación de las doctrinas brahmánicas originales y "la perversión de una gran verdad en una superstición maligna... que se ha convertido en una fuente de los más pestilentes males espirituales". Existe un efecto en la doctrina de la reencarnación de las almas de los muertos que ha sido deformada en el mundo espiritual de la India. Miríadas de seres que han dejado la vida física revolotean sobre los mortales de ese país buscando oportunidades para volver a encarnar, a fin de que puedan realizar el alivio prometido de su desarrollo imperfecto en la vida terrestre anterior. Ellos se mantienen apegados a la tierra hasta un grado que afecta a la atmósfera mental de la gente con su desesperación, pues por muy intenso que sea su deseo de volver al plano físico, pero nunca podrán satisfacer su deseo fantasioso con respecto a la reencarnación. ¿Podría la India emanciparse de la tiranía de la idea de reencarnación?, de ser así se elevarían en la escala de la iluminación espiritual muy por encima de lo que se elevó en la era de los Vedas o cuando Capilya o Gautama condujeron a sus discípulos hacia el paraíso celestial. La india debe hacer esto o será siempre presa de viles supersticiones, y su naturaleza moral será degradada por la afluencia mental de miríadas de huestes que se esfuerzan en vano por darse cuenta de la verdad del dogma.

"Yo enseñé que solo un ser era supremo, el verdadero objeto de adoración y alabanza, enseñé que de este ser procedía todo lo que tenía vida y existencia en el mundo del espíritu o del ser mortal. Yo enseñé que este ser permite a todos los que salían de la vida física regresar, pero nunca enseñé que volver de la presencia espiritual del gran Ohm daría como resultado la aniquilación del individuo o su incapacidad para regresar a la tierra como un espíritu". "Enseñé que todos los espíritus pueden regresar a la tierra para manifestarse e influir sobre los mortales, y también enseñé que tal retorno sería determinado por el sesgo mental de cada individuo".

"Había quienes no podían entender cómo un espíritu podía volver a la tierra sin reencarnarse en la vida física... Suponer que en las declaraciones que dejé registradas en cuanto a la naturaleza del alma hay o alguna vez hubo alguna base para la presente teoría de la transmigración, es pervertir una gran verdad que se ha convertido en el más grave error. Yo enseñé que el camino de la raza era hacia arriba, no hacia abajo, y que el mundo del espíritu mantenía por sí mismo el poder de emancipar a todas las almas de la servidumbre de la esclavitud espiritual. Cada vez que una gran alma surge sobre la tierra, manifestando los atributos de sabiduría y amor, tal alma no pierde su poder de expresión al abandonar tierra, pues siempre nacerán allí espíritus correlativos a través de los cuales una mente más desarrollada en espíritu puede dar expresión a su propia existencia... Como individuos, solo pueden regresar a través del poder de la transferencia espiritual del pensamiento, que les permite registrar sobre la mentalidad de los mortales la sabiduría que pertenece al mundo de la mente desarrollada. La ley del desarrollo espiritual es esta: en cuanto mejores sean las condiciones, más sabia y más pura la vida; y en el intertanto puede ser necesario para la entidad espiritual cuanto antes colocar cimientos en la vida planetaria, de esta manera cuanto antes podrá escapar de las malas condiciones allí presentes, y tener un desarrollo del alma más perfecto. Puede que tenga que permanecer en el entorno mortal durante una temporada para perfeccionar los poderes de la forma, pero una vez que eso se logra, no hay necesidad de un nuevo encarcelamiento en la tierra, porque todo lo que la tierra puede enseñar es lo que pertenece a los sentidos físicos más que a la vida espiritual y condenar a un espíritu volver a la materia después de haberse desarrollado una vez su naturaleza en esa dirección, sería degradar su alma en lugar de exaltarla, no se podría ganar nada de ello."...

Por la ley de la evolución espiritual, el espíritu una vez que ha tenido etapas formativas en la vida terrenal o planetaria ya no tiene necesidad de volver a esa condición, así como el ave desarrollada no tiene que volver a comenzar como embrión y entrar nuevamente al huevo para volver a nacer. La ley no exige el retorno al medio ambiente de la tierra después de escapar de la atmósfera de los pensamientos terrenales, ni tampoco necesita volver a expresarse de nuevo en el reino de la encarnación terrenal. Su camino hacia el nirvana está lejos de la tierra, y feliz es el alma que se libera de la idea de regresar y tener que pisar el camino a través de una vida mortal nuevamente.

Ranga Hilyod.-

Traducción M.J.D